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Un proyector 4K ofrece una resolución significativamente mayor (3840 x 2160 píxeles) que un proyector Full HD (1920 x 1080 píxeles), lo que se traduce en una visualización mucho más nítida y detallada, sobre todo con grandes diagonales de pantalla. Para gaming, esto significa una experiencia visual más intensa con texturas más claras y detalles más finos. Sin embargo, los proyectores 4K suelen requerir un hardware más potente para mostrar los juegos con fluidez en resolución 4K nativa y suelen tener un input lag mayor que los modelos Full HD. Si valora la capacidad de respuesta y el rendimiento, por ejemplo en juegos competitivos, puede que le convenga más un proyector Full HD de alta calidad, mientras que los proyectores 4K son ideales para títulos de un solo jugador con un uso intensivo de gráficos y experiencias cinematográficas
Que un proyector o un televisor sean más adecuados para gaming depende en gran medida del ámbito de uso individual y de las prioridades personales. Ambos tipos de aparatos ofrecen ventajas y desventajas específicas:
Proyector: Ideal para obtener una imagen grande, como la del cine, y una experiencia de juego envolvente, especialmente para juegos de historia o multijugador. Nuestros proyectores para gaming ofrecen hasta 240 Hz y un input lag muy bajo, por lo que también son ideales para juegos de ritmo rápido.
Televisores: Ofrecen una calidad de imagen brillante, un alto brillo y son especialmente adecuados para el uso diario. Sin embargo, el tamaño de la imagen es limitado y los modelos grandes son bastante más caros.
Cuando juegue con un proyector, el tamaño de la imagen debe corresponder a la distancia del asiento y al tamaño de la sala. A título orientativo, la diagonal de la pantalla debería corresponder a entre un tercio y la mitad de la distancia del asiento. A una distancia de 3 metros, de 100 a 120 pulgadas es lo ideal. Es importante que la imagen sea lo suficientemente grande para lograr una experiencia envolvente, pero no tan sobredimensionada que se pierdan detalles o se sature el campo de visión. La resolución del proyector también influye: se recomienda una pantalla ligeramente más pequeña para Full HD que para 4K, con el fin de aprovechar al máximo la nitidez de la imagen. Para un cálculo más preciso, merece la pena echar un vistazo a nuestra calculadora de superficie de proyección.
Sí, en principio es posible, pero la calidad de la imagen depende en gran medida de la luz ambiental. Al igual que ocurre con un televisor expuesto directamente a la luz solar, la imagen de un proyector también sufre considerablemente cuando se expone a la luz directa. La imagen proyectada aparece entonces rápidamente desvaída o lechosa. Para contrarrestarlo, las pantallas ALR (de rechazo de la luz ambiente) o CLR (de rechazo de la luz del techo), por ejemplo, pueden ser de gran ayuda. Están especialmente desarrolladas para rechazar específicamente la molesta luz ambiente / luz de techo y mejoran notablemente el contraste y la reproducción del color, incluso a la luz del día. No obstante, cuanto más controladas estén las condiciones de iluminación, mejor será el resultado.
